El quiropráctico ayudará a normalizar el funcionamiento del sistema nervioso del paciente y a restaurar su biomecánica. Para esto comenzará tomándole el historial médico, lo que le dará idea sobre el estado de salud del paciente, se informará acerca de cirugías, accidentes y otros detalles que afecten a su estado de salud actual.
Después de repasar su historial médico se realizará un exhaustivo examen ortopédico, neurológico y quiropráctico, también se repasaran las pruebas radiológicas aportadas con la idea de descubrir problemas estructurales o funcionales relacionados con la columna.
Todos estos datos ayudarán al quiropráctico a localizar el origen del problema del paciente y también se prestará especial atención al estilo de vida de este, que muchas veces juega un papel muy importante en el desarrollo del problema que se presente.
Una vez analizado todo esto el quiropráctico explicará al paciente el resultado de los exámenes y le recomendará un programa de tratamiento quiropráctico durante el cual se realizarán revisiones periódicas.
La palabra “Doctor” significa “Maestro” en latín, por lo que el doctor en quiropráctica tiene también la misión de educar al paciente en lo referente a su salud.